¿Cómo controlar la mente para dejar de hacer dietas?

Hacer dietas puede convertirse en una verdadera tortura en la vida de cada ser humano. Hay algunas personas que se someten a dietas estrictas por mera estética y otros por salud, sin embargo nadie se siente feliz al hacerlas. Desafortunadamente, el cuerpo humano suele almacenar grasas donde menos lo deseamos y sin piedad alguna; lo que en ocasiones afecta la autoestima. Así que perder peso puede convertirse en obsesión.

Tal vez no tienes tiempo suficiente para ejercitarte, aun así puedes usar el poder de la mente con el fin de controlar tus pensamientos adecuadamente. De esta manera, tus deseos de comer disminuirán.

Si eres de los que pasan la vida buscando dietas efectivas porque no te sientes bien con tu peso, ni consigues resultados positivos, este artículo es para ti.

¿Por qué aumentas de peso?

1. No controlas la ansiedad: si comes como si el mundo fuera a acabar, sólo acumularás grasa en tu cuerpo. Edúcalo, no se trata de sentir que mueres de hambre, sino de comer a las horas adecuadas y consumir comida balanceada en pocas porciones pero repetidas veces al día.
2. Engordas porque tu cuerpo cree que lo necesita: biológicamente, nuestro cuerpo suele subir de peso, incluso puede llegar a niveles de obesidad, por cuestiones de supervivencia. Mientras más estrictas sean las dietas a las que te sometas, más necesidad de acumular energía sentirá tu cuerpo.
3. Problemas con tus relaciones: los problemas de tu entorno bien sean con tu pareja, en tu trabajo o con tu familia, siempre tendrán repercusiones importantes en tu salud: tanto pueden engordarte como también pueden adelgazarte. Así que cuida tu salud mental.
4. Estrés: el cortisol es la hormona que segregas cuando estás estresado y es una de las principales causas de la grasa visceral. Vive la vida con calma y no te sumerjas mucho en los problemas ¡todo es transitorio!
5. Falta de descanso: según un estudio reciente de la Universidad de Stanford en Estados Unidos, las personas que duermen menos de 5 horas en la noche, en comparación con aquellas que duermen 8 horas o más, incrementan los niveles de grelina (hormona que produce el hambre) y disminuyen los niveles de leptina (hormona que nos indica que hemos comido lo suficiente).

Mientras menos duermas, el cuerpo sentirá más necesidad de almacenar energía para mantenerse activo durante el día, por ende te dará más hambre. Hacer ejercicio siempre te hará dormir bien.

¿Cómo usar tu mente para bajar de peso?

1. Habla contigo misma: el poder de la mente es inmenso, así que mándale mensajes como: “las personas delgadas dicen –no, gracias-“, “no compres comida para celebrar algo, no lo necesitas” o “no consumas alimentos procesados o engordarás”.
2. Ámate tal cual eres: mientras más defectos le busques a tu cuerpo, más le encontrarás. Es una realidad que en algún momento sentimos un poco de inseguridad respecto a nuestro físico. Pero si sólo te concentras en lo negativo, vivirás estresada/o y segregando cortisol constantemente: por consiguiente, subirás de peso.
3. Medita: la meditación es una técnica de relajación que tiene beneficios súper positivos en nuestro cuerpo. Puede ser de gran ayuda para adelgazar, ya que te permite alcanzar un estado de conciencia al momento de controlar tus emociones. Influye en la toma de decisiones, por lo que te resultará mucho más fácil controlar tus impulsos de comer.
4. Mantén una alimentación balanceada para tener una mente sana: comer sano y repetidas veces es la clave para bajar de peso o mantenerse en un peso ideal. Mientras más veces comas, más rápido trabajará tu metabolismo. Planifícate con tres comidas principales y dos o tres meriendas.

Consume grasas sanas como el aceite de oliva y el aguacate, y si sientes ganas de comerte un elefante, come unos cuantos frutos secos para saciar el hambre. Los alimentos frescos y de temporada siempre brindarán nutrientes a tu cerebro y a tu cuerpo. Evita los embutidos, el azúcar refinado y todo lo que sea procesado.

5. Haz ejercicio físico: practicar ejercicio con regularidad no sólo te alejará de la obesidad, sino que te permitirá mantener tu estado mental en óptimas condiciones. Esto significa que estarás más consiente de tu alimentación y más alejada/o del cortisol.