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España es un país diferente, o eso es lo que se suele decir, el deporte forma parte de nuestra vida, el clima es un aspecto muy envidiado en el resto de Europa (y junto a ello) la calidad de vida en España es la envidia de muchos países. Pero no todo es positivo, nuestro país tiene una tasa de desempleo muy superior al resto de países de la Zona Euro y la creación de empresas sigue siendo una asignatura pendiente, pese a los grandes directivos que cuenta y las empresas o multinacionales españolas que tienen gran repercusión en el mundo (como es el caso de Santander o Inditex).
Según los informes creados por el Banco Mundial y el Global Competitiveness Report, España tiene un grave problema a la hora de crear nuevas empresas, o crear nuevas StartUp. El podio de los países que favorecen la creación de empresas nacionales a nivel mundial son Nueva Zelanda, Estados Unidos y Dinamarca. ¿Cómo crear una StartUp?
España cuenta con grandes factores que retrasan la creación de una nueva StartUp. Uno de los principales motivos por los que España no llega a ser una súper potencia emprendedora se debe a la falta de tiempo por parte de los emprendedores españoles. Aunque el ecosistema también juega un papel fundamental a la hora de crear nuevas empresas en nuestro país.
En territorio nacional, España ha crecido considerablemente durante los últimos años hasta el punto de llegar a la posición 52 del ránking global de facilidad para hacer negocios y el puesto 142 del mundo en cuanto a la viabilidad para poner en marcha una empresa.
Pese a todo ello, el objetivo de España es seguir creciendo y crear empresas nacionales que compitan a nivel internacional. Uno de los hándicap por los que España no es considerada una súper potencia emprendedora se debe a que a la hora de montar un negocio los emprendedores suelen pensar sólo en el fracaso.
En este sentido, habría que fijarse en el modelo de los Estados Unidos. Desde pequeños aprenden que crear una empresa es factible pero no fácil, ya que durante el camino se puede llegar al fracaso. La creación de una StartUp no es un camino de rosas. El emprendedor puede encontrarse obstáculos y piedras que hay que saltear pero nunca llegar a la rendición.
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Por otra parte se encuentra el peliagudo tema de la financiación. España es un país con escasos datos sobre la creación de empresas debido a la falta de capital y la manera de aplicar esa inversión. Por regla general, el dinero suele dirigirse hacia la dirección errónea.
Además del ecosistema y la financiación, las personas que quieran crear una empresa en España pagarán altosimpuestos y tendrán problemas con el tema de los papeleos. Pese a que ha sido modificado (y mejorado), España ha conseguido agilizar la creación de empresas y reducir de 28 a 23 los días para abrir una StartUp. Aún así (y si lo comparamos con otros países) el plazo para la apertura de una StartUp en España se sigue quedando atrás: en Singapur se tarda poco más de dos días en abrir un nuevo negocio, mientras que en Reino Unido se puede llevar a cabo el mismo día y por un precio económico: menos de 100 euros. En este aspecto, España sigue en la cola.
En definitiva, crear un negocio en España es más difícil y problemático que si se crea en otro país europeo o internacional. España tiene que mejorar tanto el ecosistema (educación y formación emprendedora), en la financiación, como en el tiempo y en los abusivos impuestos a la hora de crear una StartUp.
