Ser un estudiante, ya sea de la universidad o del colegio, apesta. Y todos lo sabemos. No eres lo suficientemente grande para nada; eres como una aguja entre un pajar de exámenes, exposiciones, informes y trabajos; tienes profesores que quieren hundirte la vida y, por si fuera poco, tus hormonas tienen una fiesta permanente a la que no estás invitado ...
Leer más »